domingo, 21 de octubre de 2012

MERMELADA DE CUENTOS: "BLANCANIEVES Y LOS 7 ENANITOS"

Os pongo unas fotos de la nueva mermelada que he adquirido en la "Tienda Mágica". Es la mermelada de "Blancanieves y los 7 enanitos". Espero que os guste.


                                                     
PREPARANDO LA MERMELADA:

Con unos botones y unos triángulos
de fieltro he ido haciendo a los
enanitos.
El triángulo lo doblo hacia atrás y lo
pego con pegamento caliente.
¡Ya tenemos a los 7 enanitos!





Un recipiente para ajos nos servirá de
casita para guardar a todos
los personajes.
El príncipe, Blancanieves y la madrastra,
los animales, el bosque...

Blancanieves de pequeña, el espejo...


Todos los elementos que aparecerán en nuestro cuento.


CONTANDO EL CUENTO:

 Os pongo la historia resumida, pero de forma que veáis a qué corresponde cada objeto. Vosotros debéis poner énfasis, cantar, cambiar de voz e incluso añadir las cosas que queráis. 


Había una vez unos Reyes que tuvieron una hija. Como su piel era blanca, la llamaron Blancanieves. Al poco tiempo murió la mamá de Blancanieves y el Rey se casó con otra mujer, que se convirtió en la madrastra de la niña. Esta mujer
era muy vanidosa y quería ser siempre la más guapa. Tenía un espejo mágico al que preguntaba: "Espejito, espejito, ¿quién es la más guapa del Reino?" Y el espejo, que no mentía, decía: "Bella entre bella tú eres, Majestad".

Pero cuando Blancanieves creció se convirtió en una bella muchacha. La madrastra preguntó al espejo: "Espejito, espejito, ¿quién es la más guapa del Reino?" Y el espejo, que no podía mentir dijo: "Bella entre bella tú eres, pero más bella es Blancanieves". La madrastra, furiosa, mandó llamar a un soldado. Ordenó que se llevase a Blancanieves al
bosque y allí la matase. Tendría que entregarle el corazón como muestra de haber cumplido con el mandato.

El soldado se llevó a la niña. Ésta, al enterarse de lo que quería hacer la madrastra, le suplicó que no la matase.
Se quedaría en el bosque y no volvería al castillo.
El soldado accedió y mató a un animal para que la reina no sospechase. Le llevaría su corazón. Blancanieves estaba asustada. Se estaba haciendo de noche. Unos animales la ayudaron a encontrar una casa en el bosque.

Era la casa de los 7 enanitos. Blancanieves les pidió que la dejaran quedarse allí con ellos. Les ayudaría y les cuidaría. Los enanitos, al oír la historia de la madrastra, dejaron que Blancanieves se quedara.

Los enanitos salían todos los días a trabajar a la mina. Extraían diamantes. Un día, la madrastra volvió a preguntar a su espejo: "Espejito, espejito, ¿quién es la más bella del Reino?" Y el espejo contestó: "Bella entre bella tú eres, pero más bella es Blancanieves". La madrastra se enteró que estaba viva y que vivía en casa de los enanitos. Se vistió de anciana y envenenó una manzana.

Cogió una cesta con manzanas y se fue a ver a la niña para engañarla. Le pidió un vaso de agua y en agradecimiento, le dio una manzana, la que estaba envenenada. La anciana se fue y Blancanieves dio un mordisco a tan sabroso manjar. Nada más morderlo, cayó desmayada al suelo. Cuando llegaron los enanitos, pensaron que estaba muerta y la metieron en una urna de cristal.

Cuando iban por el bosque se encontraron con el príncipe. Les quiso ayudar a llevar a tan bella  mujer. Un enanito se tropezó y la urna cayó al suelo. Con el golpe, salió el trozo envenenado de la boca de Blancanieves. Cuando vio al príncipe se enamoró de él. Al príncipe le pasó lo mismo y le dijo: "Blancanieves, ¿te quieres casar conmigo?" Y Blancanieves dijo que sí. Entonces se casaron...
... Y fueron felices y comieron perdices.






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